La creatividad pandémica: Del Storytelling al Storydoing
por Jocelyn Contreras

Yo creo que nunca imaginamos lo que nos esperaba en la pandemia. Para mí en particular fue un momento de total transformación, mi vida cambió en muchos sentidos. Pero también reafirmó que a todos nos entró de cara una realidad que nos incomodó a tal modo que buscamos nuevas vías para seguir creando desde nuestro lado de la cancha.

¡El godinato cambió! El home office emergió como esquema de trabajo y nos volvimos más compatibles con otras plataformas que no eran la Suite de Adobe. Aprender a escuchar y estar más unidos a un equipo fue vital para vencer los desafíos de un proyecto. Debo decir que muchas ideas las tuve que pensar en solitario y me abrumaba la comunicación en zoom, por la conexión, porque chocan las voces cuando tiran una opinión, porque “se compran, colchones, tambores, refrigeradores…” Pero todo esto solo evidencia un punto de partida que nos ponía a prueba para volvernos más resistentes y creativos.

Esta crisis que, para muchos, me incluyo, ha sido un respiro para encontrar un balance de vida, descubriendo nuevas habilidades que desconocíamos, emprendiendo, concientizando y valorando; todo esto ha dejado ver mucha más empatía y sentido social; lo que hace tiempo le hacía falta al mundo. Exponencialmente cambiar el chip ha dado cabida a nuevas ideas, nuevas formas de consumo, modelos de negocio y apertura a la innovación tecnológica, las cuales son un catalizador muy radical que nos ha adelantado en el tiempo, hoy en día es más habitual el uso de data e inteligencia artificial, ¿a poco no, Alexa? Es decir, se aceleraron procesos que se venían postergando.

Son tiempos confusos como lo dijo la marca de hamburguesas, pero también es el primer momento de la humanidad en que todo el mundo está ocupándose por resolver el mismo tema. Momentos trascendentales como este pueden observarse con diferentes miradas. Yo creo que tenemos una oportunidad importante que inspira otra forma de creatividad en donde ya no solamente buscamos contar una historia, sino hacer que las personas se involucren y vivan una experiencia, es la evolución lógica.

De ser espectadores a ser protagonistas.